Nuestro sistema de valores manifestándose en el mundo material

Palabras clave: talentos, sistema de valores

La Casa 2 es de vibración Tierra y Fija. Es la casa natural de Tauro, el signo de las sensaciones, de la lentitud y del mundo natural. Su regente natural es Venus, el planeta del placer y las preferencias personales. A nivel energético, al ser una casa de Tierra, la Casa 2 vibra de forma más densa, da una forma concreta a la vibración energética de nuestro ser esencial. Esta casa nos muestra a qué damos valor, tanto a nivel interno como externo, así como también nuestros talentos personales.

En la astrología tradicional, la Casa 2 está asociada con las posesiones, el dinero y la autoestima. Y sí, esto es lo que podemos ver manifestado a través de la casa 2, pero en realidad, no es más que el resultado de algo que hemos creado desde una realidad energética. Lo que manifestemos depende de la cultura, la era en la que vivimos y otras condiciones temporales que varían según cuándo y dónde hemos nacido.

La Casa 2 puede mostrarnos la razón por la cual nos cuesta tanto conectarnos con el placer de tener un cuerpo y de materializar lo que necesitamos para vivir de forma confortable. El signo en donde se encuentra, la posición de su planeta regente, los planetas que caen en esta casa y los aspectos que reciben nos da muchos detalles del proceso de manifestación que surge desde nuestro ser esencial.

A continuación veremos brevemente lo que nos ayuda a alinearnos con la materialización de nuestras necesidades materiales de acuerdo al signo que se encuentra en la cúspide de la Casa 2.

Signos en la Casa 2

Nos alineamos con la energía de la materialización:

• Aries: cuando defendemos nuestros valores personales.
• Tauro: cuando nos tomamos el tiempo para apreciar lo que valoramos.
• Géminis: cuando estudiamos lo que valoramos.
• Cáncer: cuando nutrimos aquello que valoramos.
• Leo: cuando representamos nuestros valores.
• Virgo: cuando perfeccionamos nuestros valores.
• Libra: cuando compartimos nuestros valores.
• Escorpio: cuando transformamos nuestros valores.
• Sagitario: cuando expandimos nuestros valores.
• Capricornio: cuando consolidamos nuestros valores.
• Acuario: cuando innovamos nuestros valores.
• Piscis: cuando nos dejamos inspirar por nuestros valores.

En todos los casos, la posición del regente de la Casa 2 indica el área de vida de donde provienen nuestros valores personales.

Los desafíos materiales muchas veces están ligados a la autoestima, a no sentirse meritorios de éxito y a creencias que condicionan la expresión natural de nuestro ser. Otras veces se relacionan con aprendizajes por lo que tenemos que pasar para crecer. La carta natal nos puede ayudar a descubrir cuales son las circunstancias que estamos atravesando y que repercuten en nuestra realidad material. En todo caso, actuar desde nuestros valores personales siempre trae algún tipo de satisfacción personal, algo que repercute positivamente en la autoestima.

Los Planetas en la Casa 2

Cuando hay planetas en la Casa 2, ellos representan partes de nuestra conciencia que valoramos y que nos proporcionan algún talento específico. Estas formas de conciencia pueden ser tanto internas como externas. Estas partes de nosotros mismos se manifiestan tanto interna como externamente.

Sol en Casa 2

El Sol representa la identidad, nuestro sentido del Yo, la enegía masculina, el padre. Cuando se encuentra en la Casa 2, valoramos el reconocimiento de la expresión de las cualidades del signo en donde se encuentre el Sol. Nos sentimos muy orgullosos de nuestros valores, tanto internos como externos. Nos gusta lo que brilla, lo que tiene importancia. Nos damos cuenta de lo que valoramos cuando observamos lo que nos hace sentir dignos.

Luna en Casa 2

La Luna representa nuestro lenguaje emocional, las necesidades afectivas, la energía femenina, la madre. Cuando la encontramos en la Casa 2, valoramos el confort emocional que nos brindan las cualidades del signo en donde se encuentra la Luna. Manifestamos según nuestro humor, lo que crea fluctuaciones en nuestras necesidades materiales. Nos damos cuenta de lo que valoramos observando lo que buscamos nutrir.

Mercurio en Casa 2

Mercurio simboliza la mente, los procesos de pensamiento, la comunicación, el intercambio de datos. Cuando se encuentra en la Casa 2, valoramos las palabras, el intelecto, la voz, el comercio. El signo en donde se encuentra indica la clase de información que preferimos obtener. Tenemos mucha versatilidad en la forma en que administramos nuestros bienes. Con Mercurio nos gusta adquirir información, ya sea a través de libros, cursos, podcasts, etc. Nos damos cuenta de lo que valoramos cuando nos escuchamos hablar.

Venus en Casa 2

Venus simboliza el placer, las preferencias personales, el poder de atracción, la sensualidad. Cuando se encuentra en la Casa 2, valoramos la belleza, el arte, la gracia y el placer que nos proporciona las sensaciones físicas. El signo en donde se encuentra Venus indica qué es lo que encontramos bello. Con Venus aquí sentimos mucho placer en materializar lo que valoramos. Venus se siente muy cómoda en la Casa 2. Nuestros valores se hacen evidentes con Venus en esta casa.

Marte en Casa 2

Marte simboliza la acción, el deseo, el coraje. Cuando se encuentra en la Casa 2 valoramos la capacidad de salir a buscar lo que uno quiere. Nos incentiva el deseo de ser independientes. El signo en donde se encuentra Marte indica la manera en que tomamos acción. Con Marte en esta posición, queremos actuar desde nuestros valores! Nuestros valores se hacen evidentes cuando observamos lo que nos enciende, lo que nos llama a la acción.

Jupiter en Casa 2

Júpiter simboliza la búsqueda de un significado, la expansión de nuevos horizontes, la aventura. Cuando se encuentra en la Casa 2, valoramos la Verdad, la exploración, los viajes hacia lo que no es familiar, lo extranjero. El signo donde se encuentra Júpiter indica cómo exploramos, cómo buscamos comprender la Vida. Con Júpiter en esta casa, puede existir suerte material o al menos, una gran cantidad de recursos materiales a nuestra disposición. Nuestros valores se hacen evidentes cuando observamos hacia donde nos abrimos a lo nuevo, lo que buscamos aprender a través de experiencias.

Saturno en Casa 2

Saturno simboliza la materialización de la realidad, la maestría, la tradición. Cuando se encuentra en la Casa 2, valoramos la responsabilidad, el método, lo que se gana a través del esfuerzo. El signo en donde se encuentra Saturno indica cómo procedemos para estructurar la seguridad material. Esto es algo que nos tomamos muy en serio cuando Saturno se encuentra en esta casa! Nuestros valores se hacen evidentes cuando observamos lo que queremos construir como fundación de nuestra realidad materia.

Urano en Casa 2

Urano simboliza la innovación, la libertad, el progreso. Cuando se encuentra en la Casa 2, valoramos lo nuevo, lo que representa un cambio dentro del status quo. Al ser un planeta transpersonal, nos encontramos con individuos que buscan manifestar la visión de futuro que bajan (download) desde la conciencia colectiva, especialmente aquellas que corresponden a la generación de Urano en el signo en donde se encuentra. Estos individuos tienen acceso a los registros akáshicos creados por su generación y se sienten impulsados a manifestar una nueva realidad. Pueden encontrar obstáculos para lograr la autonomía económica, ya que están aquí para eliminar estos obstáculos del camino y crear una nueva manera de proporcionarse de seguridad material.

Neptuno en Casa 2

Neptuno simboliza la integración colectiva, lo intangible, la fantasía, el amor incondicional. Cuando se encuentra en la Casa 2, valoramos lo inmaterial… desde la embriaguez que nos produce el vino, por ejemplo (mientras Venus prefiere el sabor del vino) hasta dormir y soñar. Neptuno en esta posición nos lleva a querer materializar lo que no puede tocarse… la música, el cine, fotografía, la inspiración. Aquí nos encontramos con otro planeta transpersonal. Estamos conectados con el inconsciente colectivo y podemos confundir nuestros valores personales con los de los demás. Esta posición busca la universalidad de valores. Hemos venido a dejar de lado nuestro ego personal y dejarnos llevar por la inspiración. Buscamos materializar una realidad más bonita y muchas veces esto requiere que abramos nuestro corazón a lo que no lo parece, hasta que logramos ver la belleza en todo. El desafío es hacerlo en el mundo concreto y no quedarnos en el mundo de los sueños.

Plutón en la Casa 2

Plutón es el planeta que simboliza transformación, lo subterráneo, el subconciente, las herencias ancestrales. Cuando se encuentra en la Casa 2, valoramos la investigación, lo oculto, los procesos de la vida. Como planeta transpersonal, Plutón despierta las herencias ancestrales que llevamos dentro de nuestro ADN para transformarlas. Trae a la luz costumbres y hábitos caracterizados por el signo en donde se encuentra, que se han repetido durante los últimos 245 años y que, a nivel generacional, necesitan dar un salto evolutivo, transformarse en lo que es necesario en el presente. En la Casa 2 realiza el proceso de metamorfosis ocurre dentro del área de nuestros valores personales. Esta posición de Plutón nos hace sentir que estamos «controlados» por una fuerza externa que no nos permite utilizar nuestros verdaderos talentos personales. En realidad se trata de automatizaciones internas que surgen de la herencia ancestral. Plutón en la casa 2 proporciona un poder fuera de lo común para lograr seguridad material y mantenernos con vida. El desafío es dejar de controlar lo material y permitir que la metamorfosis ocurra aunque creamos que estamos perdiendolo todo. Es como el camino de oruga a mariposa. Perdemos lo que conocimos como oruga, pero ganaremos el nuevo mundo de la mariposa.

Quirón en Casa 2

Quirón nos muestra en donde nos sentimos vulnerables, una herida que nunca parece sanar. Cuando se encuentra en la Casa 2, somos hipersensibles a la reacción de los demás con respecto a nuestros valores o cómo utilizamos nuestros recursos personales. Es posible que nos hayamos sentido avergonzados por nuestra situación material por alguna razón u otra. Con esta posición, tenemos el desafío de abrazar nuestros propios valores independientemente de lo que otros crean que vale la pena.